El dirigente de la Confederación Universitaria Boliviana (CUB), Max Mendoza, fue enviado con detención preventiva al penal de San Pedro de La Paz por seis meses, por existir riesgo de fuga y obstaculización en la investigación porque no acreditó familia ni domicilio, quien es imputado por los delitos de conducta antieconómica y usurpación de funciones.
El Juzgado 2do de Instrucción en lo Penal del Tribunal de Justicia de La Paz dispuso la detención del dirigente, mientras que una comisión de fiscales indaga este caso, debido a que percibió un salario de 21.870 bolivianos desde el 24 de mayo de 2018 hasta el 18 de mayo de 2022, sin cumplir los requisitos para ser representante de la CUB.
Además, por haber suscripción un contrato con una agencia de viajes por 800.0000 bolivianos, pero también realizar en estos cuatro años 31 viajes, por los que recibió viáticos, haciendo un total en daño económico de 1,5 millones de bolivianos.
Sobre Mendoza pesan seis denuncias, quien es dirigente de la CUB desde el 2018 sin cumplir con el requisito de tener una licenciatura, y lleva años como estudiante universitario sin concluir ninguna carrera.
