El director de Cooperación y Tributación Internacional del Centro Interamericano de Administraciones Tributarias (CIAT), Isaác Arias, reconoció los logros alcanzados por el Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) en el proceso de digitalización de sus servicios, para facilitar al contribuyente el cumplimiento de sus obligaciones fiscales.
“Nosotros en el CIAT tenemos una profunda admiración por el Servicio de Impuestos Nacionales, por el trabajo de todos sus funcionarios; se ha avanzado mucho en muy poco tiempo, esto se valora (…), y eso tiene que ver con la pasión de los funcionarios, con las horas de trabajo que se dedica a cada una de las temáticas”, dijo.
El representante del organismo internacional hizo la declaración durante su discurso de inauguración en el encuentro “Logros del SIN”, que se realizó entre el 7 y 8 de junio en el Salón Patujú del Hotel Regina Resort & Convenciones (Tiquipaya, Cochabamba), con la presencia de administraciones tributarias de Chile, Brasil, Uruguay, Ecuador, Panamá, además de la cooperación internacional, según un reporte institucional.
Arias comentó que la difusión de los logros de una institución es parte de una estrategia de motivación para los mismos funcionarios, en este caso, de la administración tributaria boliviana y de las organizaciones internacionales que apoyan este proceso, que así ven resultados efectivos, como el de Impuestos Nacionales.
Por su parte, el presidente del SIN, Mario Cazón, agradeció la presencia de representantes de la cooperación internacional, que acompañó el desarrollo de los servicios digitales, que hoy están a disposición del contribuyente a través del Sistema Integrado de la Administración Tributaria (SIAT en Línea).
“El año 2016, cuando yo me hago cargo del SIN, hemos recibido el mandato del entonces ministro de Economía y Finanzas Públicas y actual presidente del Estado Plurinacional, Luis Arce, de modernizar la Administración Tributaria para beneficiar al contribuyente con mejores servicios”, afirmó.
En el proceso de digitalización, el SIN recibió apoyo técnico del CIAT y de la Agencia Noruega para Cooperación al Desarrollo (NORAD), además del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
