Los cañeros y sucroalcoholeros piden un aumento de $us 10 centavos por litro de etanol y “eso está por encima de las posibilidades que hoy puede soportar la estructura de costos de YPFB y la economía del pueblo boliviano”, afirmó el ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina, al exhortar a esos sectores deponer medidas de presión.
La autoridad explicó que el costo internacional del litro de etanol es de Bs 3,60, mientras que el Estado boliviano remunera a los productores con Bs 4,80 por litro. Esta disparidad evidencia de manera clara que la solicitud de aumento en el precio del etanol carece de justificación.
Estos $us 10 centavos que proponen los sectores cañero y sucroalcoholero representa un valor muy cercano a los $us 20 millones en tèrminos de costos para el Estado. “Este costo alguien lo tiene que pagar y lo paga cada boliviano con sus impuestos, porque al final los costos de subvención lo paga todo el pueblo boliviano”, expresó Molina.
El Gobierno prevé comprar más de 200 millones de litros de etanol a partir de 2024, lo que subirá los ingresos de los cañeros y sucroalcoholeros, pero no puede acceder al aumento del precio del producto que pretenden estos sectores porque “nosotros no sólo cuidamos la economía de un sector, sino que cuidamos la economía de todo el país”, manifestó la autoridad.
En ese sentido, “la conversación con los sectores cañeros y sucroalcoholeros no se puede ejercer mediante medidas de presión (como el tractorazo), nosotros no aceptamos la presión para sentarnos a negociar bajo estas condiciones”, aseveró Molina, al ratificar su disposición a dialogar.
Para el ministro de Hidrocarburos y Energías, el “tractorazo” no conviene a ningún sector cruceño porque afectaría a la campaña de siembra y a los sectores productivos de Santa Cruz. Además, la autoridad aclaró que el Estado cumplió con el 95% de los compromisos con el sector cañero y sucroalcoholero.
